
Ricardo Amaya
Director Ejecutivo
SINERGIK CONSULTORES
El proceso de franquiciar un negocio no es solo un modelo de expansión; es un cambio profundo en la manera de pensar y operar de la empresa. Pasar de vender productos o servicios directamente al cliente final a vender el derecho de operar una franquicia requiere una transformación estratégica y cultural.
En este artículo, exploraremos los aspectos clave que todo empresario debe considerar al franquiciar su negocio, desde la creación de una central de franquicias hasta la capacitación y el soporte a los franquiciados.
- Pasar de vender al cliente final al franquiciado
El primer cambio significativo que experimentará al franquiciar su negocio es la transición de ser un proveedor de productos o servicios al cliente final, a convertirse en un proveedor de un modelo de negocio replicable este cambio “Es pasar de vender pan a vender panaderías”. Mientras que el cliente final compra productos o servicios para su consumo, el franquiciado está adquiriendo la oportunidad de operar un negocio bajo su marca y modelo probado.
Este cambio implica un enfoque mucho más estratégico, orientado a la construcción de relaciones sólidas con personas que invertirán en su concepto. En lugar de pensar únicamente en cómo mejorar la experiencia del consumidor, ahora debe enfocarse en cómo optimizar el soporte y la capacitación para los franquiciados, quienes, a su vez, ofrecerán la misma experiencia al consumidor final.
- Crear una central de franquicias
Uno de los pilares fundamentales para franquiciar un negocio es la creación de una central de franquicias. Esta central no es solo una oficina administrativa, sino el corazón operativo de la red de franquicias. Su misión será coordinar la expansión, gestionar la relación con los franquiciados y ofrecer el soporte necesario para el funcionamiento exitoso de cada unidad.
La central de franquicias debe ser capaz de proporcionar a los franquiciados las herramientas y recursos que necesiten para replicar el modelo de negocio de manera eficiente. Esto incluye desarrollar estrategias de marketing, publicidad y asistencia continua.
- Proveer capacitación
La capacitación es clave para garantizar que los franquiciados comprendan y sigan el modelo de negocio con fidelidad. Un franquiciado exitoso debe ser capaz de replicar los procesos, el servicio al cliente y las operaciones de la manera más eficiente posible. Esto solo se logra a través de una capacitación exhaustiva que cubra todos los aspectos del negocio, desde las operaciones diarias hasta la gestión financiera.
Además, la capacitación no debe limitarse solo al inicio del contrato de franquicia. Es crucial ofrecer formación continua a los franquiciados para que puedan mantenerse actualizados sobre nuevas tecnologías, tendencias de mercado y estrategias comerciales. Esto asegura que su éxito no solo sea un punto de partida, sino que se mantenga a lo largo del tiempo.
- Proveer soporte técnico
El soporte técnico es otra pieza clave para el éxito de cualquier franquicia. Los franquiciados deben sentir que cuentan con el respaldo de la central ante cualquier problema o necesidad operativa. Ya sea relacionado con el punto de venta, la tecnología utilizada o cualquier otro aspecto operativo, tener un equipo disponible para brindar soporte técnico inmediato es fundamental.
El soporte técnico también incluye la solución de problemas recurrentes, la optimización de procesos y la mejora continua del modelo. Si los franquiciados no cuentan con un sistema de soporte eficiente, pueden encontrarse con barreras que afecten su rendimiento, lo que podría impactar negativamente en el rendimiento global de la marca.
- Proveer insumos necesarios y tecnología
La tecnología y los insumos son los cimientos sobre los cuales los franquiciados podrán operar de manera eficiente. Desde la entrega de productos, equipos y materiales hasta la implementación de sistemas de gestión y software especializado, los franquiciados deben tener acceso a todo lo necesario para operar el negocio de acuerdo con los estándares establecidos por la central.
Es importante que la central de franquicias ofrezca un sistema centralizado para la provisión de estos insumos, garantizando la calidad, la uniformidad y el cumplimiento de los plazos de entrega. Además, implementar soluciones tecnológicas eficientes, como plataformas de gestión de franquicias, CRM (Customer Relationship Management), sistemas de contabilidad o aplicaciones móviles, facilitará el monitoreo de las operaciones y mejorará la eficiencia de todos los franquiciados.
- Desarrollar canales de comunicación con los franquiciados
La comunicación efectiva entre la central de franquicias y los franquiciados es esencial para mantener una relación sólida y asegurar el éxito a largo plazo. No solo se trata de comunicarse con los franquiciados en momentos de crisis o para resolver problemas, sino de mantener un flujo constante de información que permita a ambas partes trabajar de manera colaborativa.
Establecer canales de comunicación abiertos y transparentes, como reuniones periódicas, plataformas digitales o redes internas, facilita la solución de problemas, el intercambio de buenas prácticas y la retroalimentación constante. Además, la central debe estar disponible para escuchar las necesidades de los franquiciados y estar dispuesta a realizar ajustes en el modelo según sea necesario.
Conclusión
Franquiciar un negocio no es simplemente una estrategia de crecimiento, sino un proceso de adaptación y transformación. El cambio de pasar de vender al cliente final a vender una franquicia, esto implica un cambio en la mentalidad del empresario y la estructura organizacional del negocio. Además de las inversiones en infraestructura, capacitación y soporte, el éxito de la franquicia depende de la capacidad para formar una red de franquiciados que se identifiquen con la visión de la marca y puedan replicar sus operaciones con éxito.
Para tener éxito en este proceso, es fundamental que el empresario se enfoque en establecer una central de franquicias sólida, proveer capacitación y soporte técnico continuos, y fomentar una comunicación fluida con los franquiciados. Solo así podrá garantizar que cada unidad franquiciada opere de manera eficiente, manteniendo los estándares de calidad y contribuyendo al crecimiento de la marca.