Ricardo Amaya
Director Ejecutivo
SINERGIK CONSULTORES
Seleccionar una franquicia rentable es un proceso que requiere análisis y planificación estratégica. Una vez que has encontrado una opción prometedora y revisado su dossier, es crucial que verifiques si la inversión que harás está respaldada por una viabilidad financiera sólida. En éste artículo se presentan algunos pasos claves para tomar una decisión informada.
1. Evalúa el Desempeño Financiero
Es fundamental que realices una proyección financiera detallada para los primeros años de operación de la franquicia. Esto incluye desarrollar flujos de caja para, al menos, un periodo de tres años, donde se reflejen claramente los costos y gastos que el franquiciante te debe suministrar. Recuerda que estos números deben ajustarse a la realidad del mercado local en el que planeas operar, ya que los costos pueden variar considerablemente entre una gran ciudad y una más pequeña. Realiza una investigación exhaustiva de cada uno de los costos y asegúrate de que sean precisos y realistas.
2. Verifica los Ingresos de la Franquicia
La única forma de validar la proyección de ingresos es contactando a los franquiciados actuales. Pregúntales sobre el comportamiento real de sus ingresos y compáralo con las estimaciones que te ha dado el franquiciante. Revisa detenidamente los escenarios que te presenten: optimista, intermedio y pesimista, para tener una idea clara de los posibles resultados del negocio. Los escenarios ayudan a establecer el nivel de riesgo que representa la opción de franquicia.
3. Busca Asesoría Experta
Si detectas incongruencias o dudas sobre las proyecciones financieras, es recomendable que busques el apoyo de un experto en franquicias. Este profesional te ayudará a determinar si las bases del proyecto son sólidas o están fundamentadas en suposiciones arriesgadas. Asegúrate de que las decisiones se tomen con base en hechos comprobados y estudios financieros serios.
4. Analiza el Derecho de Entrada
Es vital que el derecho de entrada (fee inicial) que te solicitan sea razonable en relación con los flujos de caja proyectados. Algunos franquiciantes, lamentablemente, no calculan este valor de forma justa y cargan el proyecto un alto costo. Una franquicia debe basarse en un esquema de “ganar-ganar”, donde tanto el franquiciante como el franquiciado obtengan beneficios sostenibles.
5. Evita las Franquicias Fantasma
Por último, ten cuidado con negocios que no han sido probados en el mercado y que son una “idea de negocio”. Estas “franquicias fantasma” suelen carecer de estudios financieros sólidos y pueden poner en riesgo tu inversión. Al adquirir una franquicia, estás comprando no solo un negocio, sino también la experiencia en el negocio y por ende las proyecciones que respaldan un modelo probado.
La franquicia es una relación a mediano y largo plazo que requiere trabajo, esfuerzo y dedicación para construir un negocio sólido. Asegúrate de contar con la información adecuada antes de tomar una decisión, asesórate de una firma consultora en franquicias que podrá realizar una evaluación minuciosa de la opción de inversión.